Se confirmó la expectativa y el BCRA subió 300 puntos la tasa del plazo fijo: así rinde ahora
Tras el dato de inflación, el mercado esperaba otra suba de tasa del plazo fijo, que se confirmó esta mañana. Advertencias sobre los riesgos
Tal como esperaba el mercado, el Banco Central actualizó 300 puntos básicos este jueves la tasa de política monetaria. Así, llevó el rendimiento del plazo fijo tradicional, que es a 30 días y por hasta $10 millones, al 53%, mientras que para el resto de los depósitos se establece en el 50%.
Esto sucedió luego de conocerse el dato de inflación de mayo este martes, que fue del 5,1%, por debajo del 6% registrado en el mes previo, pero aún alta, sobre todo si se tiene en cuenta que la interanual (de los últimos 12 meses) fue superior al 60%. Por eso, la City había puesto el foco en la tasa de política monetaria, que impacta en el rendimiento del plazo fijo.
Plazo fijo: cómo quedan las nuevas tasas
El Directorio del BCRA elevó los límites mínimos de las tasas de interés sobre los plazos fijos de personas humanas de la siguiente manera:
- Nuevo piso en 53% anual para las imposiciones a 30 días hasta 10 millones de pesos.
- Para el resto de los depósitos a plazo fijo del sector privado la tasa mínima anual garantizada se establece en 50%.
Además, el BCRA elevó la tasa de interés nominal anual de las Letras de Liquidez (Leliq) a 28 días, que pasan de 49% a 52%.
Con la nueva tasa, ¿el plazo fijo le ganará a la inflación?
El rendimiento anual del plazo fijo queda en 53% y, así, se logra un interés mensual del 4,4%. Un dato relevante es que, a pesar de la actualización de tasas, el plazo fijo seguirá pagando por debajo de la inflación en julio, dado que la encuesta REM del Banco Central estima una suba de precios del 4,5% para ese mes.
Por otra parte, una tasa nominal anual (TNA) de 53% implica una tasa efectiva anual (TEA) que roza el 68%. Al considerarse de esta manera, las nuevas tasas sería positivas si se cree en el resultado de la encuesta REM, que proyecta una inflación del 60,1% para los próximos 12 meses.
La presión que motivó la suba de tasas
Dado que precedían cinco meses en los que cada vez que se conoció el Índice de Precios al Consumidor (IPC), el Banco Central (BCRA) subió ese parámetro, todo indicaba que, tal como lo hizo este jueves, lo volvería a hacer por sexta vez y más fuertemente que las anteriores. ¿Por qué tomó esta decisión y por qué el nivel de suba que realizó fue más elevado que en ocasiones previas?
Desde el Banco Central entienden que "los datos de mayo confirmaron la desaceleración en la inflación que se había iniciado en abril, con una significativa baja en la categoría núcleo", y expresan que esperan que los registros de inflación mensuales continúen descendiendo gradualmente. Por otra parte, señalan que "se ha observado recientemente un aumento en la percepción del riesgo financiero internacional".
La autoridad monetaria expresa en el comunicado oficial que "continúa su proceso de gradual normalización de la tasa de política y del resto de la estructura de tasas de interés de la economía, de forma de contribuir a preservar la estabilidad financiera y cambiaria, sostener el crecimiento del producto y del empleo y reducir la inflación".
Ante el nuevo panorama que se le presenta, marcado por un desplome reciente de los bonos que ajustan por CER y por un alza de los distintos tipos de cambio alternativos -el dólar blue y los financieros, que se dispararon tras el desarme de esos instrumentos de inversión luego de meses de paz cambiaria-, el equipo económico evaluó cuál es la mejor estrategia para contener el precio de la moneda estadounidense y la inflación. Los analistas explican que la suba de tasas es un paso esencial en ese sentido.
En diálogo con iProfesional, el economista Pablo Ferrari afirma que hay que tener en cuenta a la hora de abordar las razones de esta medida que "tipo de cambio, bonos, tasas de interés de referencia e inflación están orgánicamente vinculadas". Así explica que el movimiento del tipo de cambio y el rendimiento de los bonos tienen un margen de ganancia implícito, a diferencia que la tasa de referencia, que es explícita. Sin embargo, asegura que "en los tres casos, el desenvolvimiento de la inflación es el otro factor (además de la tasa) que determina el rendimiento real de los tres instrumentos financieros".
FMI, bonos, dólar e inflación: las razones de la suba
En ese marco, hay cuatro elementos centrales que determinaron la decisión del BCRA de subir la tasa de interés este jueves. El primero a tener en cuenta, según recuerda Ferrari, es que el acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) implica que en algún momento haya un rendimiento real positivo de la tasa de interés de referencia.
Así, tal como señala el economista de Ecolatina, Juan Pablo Albornoz, "incluso antes de lo sucedido en el mercado de renta fija, ya era esperable que el Central elevaría por sexta vez en el año la tasa de referencia", principalmente porque la inflación, aunque desacelera, lo hace mucho más lento de lo esperado.
Explica que la consecuencia de esto es que "todavía no llega a empardar siquiera la inflación esperada" y señala al respecto que, a fines de mayo, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) proyectó una inflación mensual hasta agosto que superaría el rendimiento actual de las Letras del Liquidez (LELIQs).
Así, según su opinión, este es el motivo central para realizar un nuevo incremento en junio, aunque la aceleración de la brecha cambiaria también puede motivar al BCRA a elevar el rendimiento de las LELIQs y de las tasas pasivas mínimas (que son las de los plazos fijos).
Objetivo: seguir al dólar
En segundo lugar, Ferrari menciona que "lo que busca el BCRA con esta medida es que el ritmo de suba de la tasa siga el del incremento del tipo de cambio", es decir, el ritmo del dólar. Sobre este tema, Lucio Garay Méndez, economista de Eco Go, indica que una suba en la tasa es fundamental porque ayudaría a reconstruir la curva de pesos, que quedó golpeada luego del miércoles pasado.
Y respecto de este punto, la economista de Grupo Broda Elena Alonso describe que el desplome de la semana pasada de los bonos hizo que el Gobierno generara una demanda de los mismos para compensar esa caída del precio. "Eso puso más pesos en la plaza dando vueltas, lo que disparó la suba de los precios de cotización del dólar", señala.
Así, los analistas consideran que el Gobierno se ve obligado a subir tasa de política monetaria para hacer más atractivos los instrumentos en pesos y evitar, así, que la gente se vaya al dólar. Esto es porque, tal como indica Garay Méndez, "una nueva suba en la tasa de interés aumenta los incentivos a demandar pesos", algo deseable en un contexto en el que gran parte del flujo de inversiones está yendo hacia el dólar.
Aquí aparece la variable dólar, ya que indica que un síntoma del golpe a la curva de pesos es la brecha cambiaria, que llevó al dólar Contado Con Liquidación (CCL) a rozar los $240 en los últimos días. Y, señala en este sentido que "el desarme masivo de bonos CER que se dio entre martes y jueves probablemente haya sido un traspié fuerte", que motivó la suba de tasas.
Por su parte, Glustein señala que "lo que se demostró con el derrumbe de bonos es que no había demasiada confianza en relación al pago en lo que respecta al mediano y largo plazo". Y considera que el BCRA tiene claro que el ritmo que le imprime al crawling peg para el tipo de cambio está muy asociado a la inflación y no a la expectativa del mercado. Así, para él, la inflación es el principal detonante para la nueva suba de tasas.
Suba de tasa: los riesgos que implica
Una voz del mercado reconoce que la suba de tasas puede significar que el BCRA se está tomando en serio la herramienta del tipo de interés como un instrumento para combatir la inflación, y reconoce que puede servir para calmar al dólar y los precios, pero advierte que incrementa el déficit cuasifiscal.
Lo que sucede es que el Central emite principalmente para financiar al Tesoro y para comprar dólares. Por el primer motivo, después ofrece Leliqs precisamente para sacar pesos de circulación del mercado y evitar que corran al dólar y aceleren la inflación.
Y en este punto, el Tiscornia alerta que "el problema con la suba de tasas del BCRA es que lo obliga a pagar más interesas por las LELIQ, lo que incrementa el peso de la deuda a un ritmo más rápido" e implica, tal como se dijo, más emisión.
Así considera que el Central puede entrar en una dinámica medio peligrosa porque vuelca más pesos al mercado, lo que genera más inflación, como reflejo de una estrategia que busca mejorar el atractivo de los instrumentos en pesos para que no vayan al dólar.
En consecuencia, el director de CyT Asesores Económicos dice que, "si se sube la tasa pero no hay perspectiva positiva en el ámbito fiscal, estamos frente a un gran problema".-
Fuente de la Información: www.iprofesional.com